La semana del 23 al 30 de abril es la Semana Salvaje en Barcelona, En la Fira de Barcelona encontramos cinco pabellones con representantes del producto salvaje de todo el mundo, un evento que se repetirá anualmente, e irá adquiriendo notoriedad, convirtiendo Barcelona en la capital mundial del producto salvaje.
Nos reunimos con la Asociación de Pescadores de Alaska en el restaurante Nobu de Barcelona, probamos varios platos elaborados por el chef Sergio Martínez que ha utilizado el producto salvaje de Alaska: salmón, salmón albino, ikura, bacalao negro (Que por cierto es uno de los productos que popularizó el mismísimo chef Nobu en su momento). Y durante la cena alucinamos con lo que nos explican los pescadores y representantes de la asociación:
Lo primero que hay que entender es que la pesca es el principal negocio de Alaska y que los pescadores hace 60 años que están asociados para asegurarse que su negocio prospera y no se deteriora. Destacar el control que tienen de la pesca. Saben exactamente cuantos salmones llegan al mar y calculan los que pueden pescar y los que deben dejar volver a los ríos para que se reproduzcan y se mantenga el negocio y al mismo tiempo el ecosistema. ¡Y lo respetan sin hacer chanchullos!!!
El agua de Alaska es pura, limpia, no hay contaminación, no es lo mismo comer un pescado del mar de Alaska que comer uno del mediterráneo, y por esto los productos de Alaska están muy valorados por los chefs que buscan la mejor calidad, pero hoy en día también buscamos la proximidad y trazabilidad del producto y a priori puede parecer que enviar pescado de Alaska va en contra de esta moda, sin embargo, aprendemos que en Alaska hay más osos que personas y que saber distribuir el excedente de pesca forma parte de una sostenibilidad global. Y los pescadores se han adaptado a esta situación, el pescado llega en perfectas condiciones porque en el propio barco, recién pescado y antes que llegue el rigor mortis, lo preparan y ultra-congelan, permitiendo que la distribución a nivel mundial sea excelente. Como anécdota, uno de los pescadores nos explica que todas las huevas de salmón (Ikura) que llegan a Barcelona desde Alaska salen del mismo sitio, del trabajo de 3 hermanas que viajan en el barco de la familia, y para pagarse los estudios se dedican a extraer las huevas del salmón.
Y el plato fuerte de la noche llega cuando escuchamos la experiencia de Tomi Marsh, actual vicepresidenta de la asociación, una mujer de menos de 50 kilos que con otras dos mujeres llevan toda la vida pescando con su barco en el mar de Alaska, un mar frío, helado mejor dicho, y pescan halibuts, bichos de hasta 200kg. Solo pensar en eso da un valor increíble al producto que degustamos.
Durante toda la semana varios restaurantes de la ciudad hacen platos con este producto, os dejamos el listado por si os queréis apuntar:
@dospalillos @dospebrots @flaxandkale @greencobarcelona @nectari_restaurant @tamae_bar @velissimabarcelona @virensbarcelona y @restaurant_xavierpellicer